Buenos días, Guillermo,
he empezado a echar un vistazo al libro y he visto que he llegado hasta el final… Cierto que algunas partes las he pasado rapidito, pero he encontrado tres cosas que me han interesado muchísimo.
Una es el recuerdo que haces de la propuesta de tu maestro de traer objetos extraños al aula para analizarlos y crear curiosidad. Creo que sería muy útil en mis clases de medio, pero debo reconocer que mi ignorancia en cuanto a máquinas es infinita…. Pensaré en ello, porque me gustaría implicar a las futuras maestras en este proceso.
Otra es cuando hablas del exceso de sal y pimienta, que puede estropear la comida. Ésta es una preocupación recurrente en nuestro Lab 0_6, donde las personas adultas suelen preguntar «qué hay que hacer aquí» y no queremos decirlo porque seguro que si lo ponemos sólo dejarán que pase aquello para lo que está establecido.
Por último me gusta mucho todos los ejemplos que vas poniendo de exposiciones diversas (te veo con una cámara en todas las exposiciones del mundo) y los esquemas, que me han hecho pensar en el esquema de relación mates-ciencia que buscábamos en aquel grupo de trabajo que acabó por la pandemia con mucho trabajo todavía por hacer.
Y creo que te queda otro libro por escribir y es el de centrarse en cómo acercar los museos con rigor museográfico y científico (jorge Wagensberg dixit) a los niños más pequeños. Si no estuviera tan atareada, me encantaría participar.